LA INTROSPECCIÓN | 1993-2006

En esta etapa, la obra dirige su mirada hacia la psique, es una pintura de introspección, con una dicción intimista y lírica, pintura abierta y genesíaca llena de signos, líneas, esgrafiados y texturas que desembocan en espacios vibrantes, cálidos y luminosos que huyen de la evidencia, generando un mundo de presencias, sensual, no exento de misterio, síntesis de un contenido tan conceptual como físico, a la vez etéreo y terrenal.